Influenza aviar
La influenza aviar (o gripe aviar) es una enfermedad de los pulmones y las vías respiratorias que se encuentra en las aves y es causada por el virus de la influenza. Esta infección viral también puede propagarse a los humanos, por lo que si su ave está infectada, busque tratamiento inmediato y tome todas las precauciones necesarias para prevenir un brote de gripe aviar.
Debido a su potencial infeccioso para los humanos, cualquier brote de influenza aviar debe informarse al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos. Recientemente, se ha impuesto una prohibición a las aves de compañía importadas de países donde se ha informado sobre la gripe aviar (es decir, ciertos países africanos, asiáticos y europeos).
Para asegurarse de que su nuevo ave no tenga influenza aviar, haga que un veterinario la examine para detectar enfermedades infecciosas y averigüe sobre los orígenes del ave.
Síntomas y tipos
Los síntomas de la influenza aviar incluyen:
- Falta de apetito
- Problemas respiratorios
- Hinchazón de la cabeza
- Descarga de los ojos
- Diarrea
- Depresión
Es importante tener en cuenta que no todas las aves infectadas con influenza aviar mostrarán síntomas y que puede morir repentinamente. Además, si no se trata a tiempo, la tasa de mortalidad por gripe aviar es alta.
Causas
La influenza aviar se propaga a través del contacto directo con las secreciones nasales y las heces de un ave infectada. Cualquier ave puede infectarse con este virus, incluidas las aves silvestres, domésticas o de compañía, y las aves de corral.
Tratamiento
Cualquier ave que muestre síntomas de influenza aviar debe ser puesta en cuarentena inmediatamente y separada del resto de las aves (o humanos). El veterinario diagnosticará la gripe aviar mediante pruebas de infección viral. El tratamiento, sin embargo, depende del virus específico que infecte al ave.
Prevención
Se ha desarrollado una vacuna para prevenir la influenza aviar, pero su éxito en aves (aparte de las aves de corral) es dudoso. Por lo tanto, es importante prevenir la exposición y el contacto con aves infectadas, si es posible.
Poner en cuarentena a las aves infectadas y desinfectar a fondo el medio ambiente también evitará la propagación de la influenza aviar.