A la mayoría de nosotros nos encanta descansar y relajarnos en nuestro propio trozo de tranquilidad personal, el patio trasero. Pero, ¿cómo puede disfrutar de los frutos de su trabajo, es decir, su ardua batalla para domar la vegetación de su patio trasero y convertirla en un oasis, cuando su perro parece decidido a hacer que parezca una zona de guerra? Siga leyendo para conocer algunos consejos profesionales para coexistir pacíficamente en el paraíso con su mejor amigo.
Crear una “zona de eliminación”
Existe el mito de que la orina de la perra es más dañina para el pasto que la orina del perro macho, pero son prácticamente idénticos, especialmente en perros esterilizados (como lo son la mayoría de los perros en los EE. UU.). Simplemente lo notamos más con las chicas que con los chicos, porque las chicas tienden a orinar al aire libre y los chicos tienden a favorecer la vegetación vertical.
Una estrategia exitosa para lidiar con este problema es designar un área pequeña de su jardín como el «baño» de su perro. Incluso puede delimitarlo con bordes y rellenarlo con grava, si lo desea. Solo tiene que entrenar a su perro inicialmente para usar esta área, pero una vez que lo hace, salva su jardín y simplifica mucho la limpieza.
La solución a la contaminación es la dilución
También vale la pena considerar poner más agua a disposición de su perro, ya que un poco más de dilución en la orina no solo es saludable para él, sino que también disminuirá su toxicidad para el césped.
Considere xerojardinería
La desventaja es que la xerojardinería es inicialmente bastante costosa, pero después de eso, los costos de mantenimiento son extremadamente bajos y su jardín casi no requerirá riego.
No dejes a tu perro desatendido
Incluso es posible que deba recurrir a mantener a su perro con correa mientras está afuera con él, o al menos observarlo como un halcón y recompensarlo por su buen comportamiento.
Quítalo de la línea
¿Necesitas ideas? Haga una reserva para él en una guardería para perros confiable y segura en su área un par de veces por semana. Salga a caminar oa correr a paso ligero, y use el juego dirigido en el patio trasero (es decir, un juego de buscar) para ayudarlo a olvidar que desenterrar las begonias sería un pasatiempo muy entretenido.
¡Yarrrrr! enterrar algún tesoro
¿No tienes ganas de cavar tú mismo? Compra una piscina para niños económica, llénala con arena o tierra y haz como un pirata. Tendrás un perro feliz y un jardín saludable.